Hace una semana, un bebé fue encontrado muerto en el penal de San Miguel, en Puebla.
Este bebé según versiones fue encontrado por un interno del mismo penal. El cuerpo del bebé estaba en un contenedor de basura, en una bolsa de plástico. Mencionan que tenía residuos de cal, además de que presentaba una incisión en el abdomen.
Se desconocía de donde había salido el cuerpecito y quién o quiénes lo habrían dejado en el contenedor, también, dónde habría fallecido. Hoy, luego de una semana, las autoridades dieron a conocer, que el cuerpo del bebé encontrado en el contenedor de basura del penal, corresponde al cuerpo de un menor de aproximadamente cuatro meses que fue robado de un panteón denominado San Nicolás Tolentino, en la alcaldía de Iztapalapa.
Eso lo dio a conocer Saskia Niño de Rivera, presidenta de la Asociación Civil «Reinserta». El bebé se llamaba Tadeo, según la información nació el 4 de octubre del 2021 en CDMX y murió el 5 de enero del 2022 por problemas intestinales. Asimismo, el 6 de enero fue sepultado en el panteón en mención.
Señalan que el cuerpo del menor fue robado del panteón, luego, se presume que fue utilizado para ingresar droga al penal, y que pudo ser una mujer quien lo ingresó.
Al saber los padres del bebé la noticia, fueron a la tumba donde había sido sepultado y no encontraron su cuerpo, la tumba estaba abierta. Dicen que el mismos personal del panteón amenazó a los padres para que no dijeran nada, a lo mejor no es el único caso.
Por lo pronto, la familia del bebé acudieron a la Fiscalía General de la República para que se investigue y se haga #justiciaparatadeo
Únete a la conversación